viernes, 12 de septiembre de 2008

¿Será una bola de pelo? como le pasa a los gatos


Otra vez siento una bola en el pecho, otra vez… ya llevaba un par de semanas sin esta sensación y hoy regresó, no regresó por casualidad, regresó porque algo pasó, quisiera no ser sensible, quisiera que nada fuera taaan importante como para oprimirme el pecho…

lunes, 8 de septiembre de 2008

sin el papel principal


después de un breve recorrido por el universo de los blogs me siento mejor, leer pedacitos de historias hacen que uno sienta empatia. Resulta que ayer me tiré al vacío (aún sigo cayendo) la cosa aquí es que -algunas veces- esa voz "incomoda" me recuerda que estoy empeñando mi corazón, que arriesgo mucho y que seguramente me quede bien bien jodida... no lo dudo, en eso por primera vez hasta mi corazón y mi cerebro coinciden ¿y qué le voy a hacer? pues nada, total, ya me tiré. Lo que pienso ahora es que esta vez muy probablemente me va a tocar perder, ¿qué más da? mmm... será que eso es parte del sagrado ¿equilibrio? de la vida... casi siempre juego en mi cancha, pongo las reglas y las cosas se dan bajo mi propio juicio, esta vez es diferente, este vez me usan no uso, pero así es esto, ¿acaso los usados han levantado quejas? si, si lo han hecho... pero mi buzón de quejas y sugerencias está más olvidado que mis clases de piano, así q ni modo reinita, está vez nos toca apechugar, esperar, dar, no recibir y probablemente sólo ser una aventura, el paño de lágrimas, la que quedará olvidada, sin ninguna trascendencia y si en papel principal, y al final final (después del duelo del desamor) eso es lo que más duele: el ego.